“La única carrera en Tecnólogo Minero está en el CURE” 

La carrera en Tecnólogo Minero tiene una duración de tres años y se dicta únicamente en la sede de Treinta y Tres del Centro Universitario Regional del Este (CURE). Para egresar se requieren 272 créditos, incluidos 15 créditos que otorga la pasantía final de grado. 

Claudio Gaucher, licenciado en Geología y doctor en Ciencias Naturales, actual coordinador de la carrera, definió que la formación prepara a las y los estudiantes para participar de las “diferentes etapas de la minería: la prospección, exploración y explotación de recursos minerales”. 

Para inscribirse a la carrera no es necesario llegar con una orientación determinada, “por supuesto que si el estudiante hizo un bachillerato donde tenga matemática, física y va a estar mejor encaminado”, explicó Gaucher, aunque “la experiencia dice que estudiantes del área humanística también pueden ingresar y terminar con éxito la carrera”.  

“El único lugar donde se puede aprender en Uruguay es en el CURE de Treinta y Tres, es la única carrera en Tecnólogo Minero que tenemos”, remarcó Gaucher.

Un “área subexplorada” en Uruguay con “mucho potencial”

Según describió Gaucher, Uruguay tiene “mucho más potencial de lo que hoy en día se explota, es un área subexplorada, porque tenemos poca tradición minera y geológica”.  

En territorio nacional, en la zona este “hay un importante yacimiento de arenas negras que contienen titanio y tierras raras que se necesitan para todas las aplicaciones más tecnológicas que se imaginen, Uruguay tiene yacimientos interesantes que nunca han sido explotados”. 

Respecto a la industria cementera y de cal, “hay emprendimientos en Treinta y Tres y Maldonado, es una una gran industria que requiere y que tiene empleados a muchos tecnólogos mineros”. Uruguay posee reservorios de “rocas ornamentales como la piedra laja, los mármoles en toda la región sureste”, hierro que “se está explotando en Lavalleja, se está comenzando en Rivera y hay grandes reservas en Uruguay”. Al igual que los denominados “áridos para la construcción”, como “el balasto para la caminería rural, la arena para la construcción” y “la piedra partida”, afirmó Gaucher.

Los tecnólogos mineros “están capacitados para responder cuál es el método (de extracción), si puede ser minería a cielo abierto o minería subterránea”. Después “hay que llevar a cabo la abertura de frente, la colocación, diseño de mallas, de voladuras, la colocación de explosivos y la realización de las voladuras para quitar el material y los métodos de transporte a una planta de procesamiento”. “También están formados en una disciplina que es la beneficiación, sacar un 30% de hierro y el otro 70% hay que eliminarlo porque no te sirve para nada”, aseguró.

En ese marco, Gaucher expresó que “hasta ahora, todos los egresados y una buena parte de los estudiantes avanzados están trabajando en minería, la salida laboral es muy buena”. Asimismo, enfatizó que “de desarrollarse el hierro que está en Valentines (localidad ubicada en el límite entre Treinta y Tres y Florida) hace que inmediatamente tengas un déficit cercano a los 100 profesionales, ya pasó cuando estuvo el proyecto la Aratirí”.

“Lo mejor de la carrera es cuando vas al campo”

Cuando Camila Zunino ingresó al CURE en el año 2019, “no estaba muy segura que carrera estudiar e inicié por el Tecnólogo en Administración y Contabilidad”. Sin embargo, “me reencontré con un compañero del liceo que estaba estudiando Tecnólogo Minero en ese entonces” y “me comentó cómo era la carrera, las asignaturas y me gustó”, por lo que “al año siguiente me inscribí”. 

Similar fue el caso de Emanuel Benitez, que se trasladó de Florida a Montevideo en 2019 para estudiar Ingeniería Civil, aunque “quería estudiar algo relacionado a la minería”. “La carrera me dejó de gustar y terminé investigando nuevamente que posibilidades tenía y encontré la carrera de Tecnólogo Minero en la misma página de la Facultad de Ingeniería, en el año 2022 decidí arrancar y me mudé de Florida a Treinta y Tres”, describió. 

En cuanto al desarrollo de la carrera, ambos destacan las salidas de campo. Zunino dijo que el primer año “tiene muchas materias que son del tronco común, entre ellas las que más me fascinaron fueron química y geología”. Pero “en el segundo año donde tomamos temas más internos del rubro minero, sabía que estaba en lo correcto porque había cambiado incluso la forma de estudiar”. 

“Mi generación ingresó en 2020, en la pandemia pero a pesar de eso hicimos esfuerzos y tuvimos unas salidas de campo maravillosas. Conocimos varios de los recursos minerales y de las empresas que tenemos en el país, la carrera te lleva a salidas de campo donde vos podés conocer el ámbito en el que te vas a desarrollar laboralmente en el futuro, conocimos el cementos y las amatistas en Artigas, las minas de oro en Minas de Corrales, en Rivera”, añadió. 

“Desde que tengo memoria me interesaba la minería”, recordó Emanuel, que a su vez explicó que lo terminaron “de enganchar las salidas de campo, visitamos minas, tuve la posibilidad de viajar por todo el Uruguay prácticamente con la carrera, viajamos a Brasil” y “todo eso nos llevó a empaparnos un poco de lo que es ser un Tecnólogo Minero”. “En casi todas las materias, por lo general, tenés una salida de campo vinculada a la materia, en explosivos y voladuras fuimos a ver una voladura, en explotación de yacimientos o recursos minerales vamos a la cantera a ver cómo se explotan esos recursos”, ejemplificó. 

Para Emanuel, que está cursando su tercer año, uno de los momentos más satisfactorios fue recorrer las minas en Brasil: El viaje de Brasil fue sin duda un sueño, es impensado acá en Uruguay recorrer las minas de las dimensiones que hay en Brasil, fuimos a una mina de carbón y una mina de mármol, las minas más grandes del Uruguay son, quizás, un tercio de lo que son allá. Además del compañerismo y del buen ambiente que siempre hubo en estas salidas de campo, lo mejor de la carrera es cuando vas al campo. No me arrepiento de haber elegido esta carrera”.

Camila que egresó de Tecnólogo Minero a mediados del corriente año, realizó su pasantía “de prospección y exploración de posibles recursos minerales a lo largo de la cuenca del Cebollatí”. “La realicé en los laboratorios de la sede del CURE en el PDU (Programa Polos de Desarrollo Universitario) de Geología y recursos minerales, consistió en buscar posibles recursos que se pudieran encontrar en esa zona y fue una labor bastante larga, me llevó más de la mitad del año pasado, pero fue un procedimiento muy enriquecedor”, manifestó.

Luego de finalizar sus estudios en Tecnólogo Minero, Camila se inscribió en la Licenciatura en Gestión Ambiental (LGA) que también se dicta en el CURE. “No vamos a hacer hipócritas y decir que la minería no daña al medio ambiente, porque parte de sus actividades es extraer mineral directamente desde el suelo y eso lleva a una alteración del paisaje”, argumentó. “Siempre me interesó poder gestionar ese aspecto de la minería”, por lo que “quise entrar a la LGA para ver qué herramientas me podía brindar para desarrollar esta actividad de forma sostenible y sustentable”.

Ingresando a https://www.cure.edu.uy/ensenanza/oferta-educativa/tecnologo-minero/ podrás ver los requisitos de ingreso, objetivos, reglamentos, preguntas frecuentes, videos y mucho más.